Fotografías de boda, ¿con o sin retoque?

Todavía hay algunos fotógrafos que se jactan de no retocar sus fotos, como si de un valor añadido se tratase. Además, si se trata de fotografía digital, no entiendo como es posible no retocar las fotos, ya que un fotógrafo profesional capturará sus imágenes en RAW, formato especialmente indicado para profesionales, y para convertirlas a JPG necesita forzosamente pasar por un proceso de revelado digital. Lo que sí puede hacer es utilizar los valores por defecto del software de revelado, los valores automáticos o revelar levemente utilizando muy pocos valores de revelado. Pero, ¿cómo puede ser esto motivo de elogio o de ventaja competitiva? Los programas de revelado digital en RAW se utilizan tanto para corregir errores en la captura de la imagen como para mejorar la calidad de una imagen correctamente capturada.

Pienso que hoy en día un fotógrafo es más que un buen operador de cámara creativo, además tiene que ser un diseñador fotográfico capaz de sacarle el mayor partido a sus imágenes. A veces el retoque se asocia directamente a un embellecimiento irreal, a la transformación de imágenes o la aplicación de efectos artificiales. Y aunque el retoque es capaz de hacer eso, también es capaz de mejorar las fotografías dotándolas de mayor naturalidad y claridad. Por eso, los fotógrafos que no retocan sus fotografías no actúan con ventaja sobre los que sí las retocan. Solo actúan con ventaja sobre las que las retocan mal, ya que si no eres un buen profesional el retoque más que mejorar puede empeorar tu trabajo.